¿Qué es una indemnización por accidente laboral?

La indemnización por accidente laboral, es un aspecto fundamental que todo empresario o gestor de RRHH debe comprender para poder dar soporte a sus empleados en casos de indemnizaciones por accidentes laborales. Tenemos que tener claro, que cuando uno de nuestros trabajadores sufre un accidente laboral, tienen derecho a recibir una compensación económica por el perjuicio sufrido, en caso de que exista incumplimiento por parte del empleador.
Esta compensación puede cubrir distintos aspectos, como los gastos médicos derivados del tratamiento de las lesiones sufridas, así como la pérdida de ingresos debido a la incapacidad temporal o permanente que el trabajador pueda experimentar. La cuantía de la indemnización dependerá de la gravedad del accidente y de las consecuencias que tenga en la vida laboral y personal del trabajador afectado. Además, es esencial que tanto el trabajador como el empleador comprendan las obligaciones y derechos implicados, para asegurar que el proceso de reclamación se realice de manera justa y eficiente. También es importante considerar los aspectos legales que rigen las indemnizaciones por accidentes laborales, asegurando que todas las partes involucradas cumplan con las normativas establecidas.
En este artículo detallamos todas las claves para poder profundizar en todo lo relacionado con la indemnización por accidente laboral, desde cuales son los casos, quien paga la indemnización por accidente laboral hasta cómo calcular su cuantía.
¿Qué es un accidente de trabajo?
Un accidente de trabajo se define según lo establecido en el artículo 156 de la Ley General de la Seguridad Social. Este tipo de accidente incluye cualquier lesión corporal que el trabajador sufre al servicio de la empresa o durante su jornada laboral. Además de los casos que ocurren dentro del lugar y horario de trabajo, la definición se extiende a varias situaciones especiales:
1. Accidentes "in itinere": Se consideran accidentes de trabajo aquellos que suceden durante el trayecto de ida y vuelta entre el domicilio del trabajador y el lugar de trabajo. Este reconocimiento se mantiene siempre que el trayecto no se haya interrumpido o alterado por motivos personales.
2. Enfermedades que se presumen como accidentes de trabajo: Ciertas enfermedades profesionales están listadas en un cuadro que se actualiza periódicamente y se presume que son causadas por el ejercicio del trabajo. Además, enfermedades no incluidas en este cuadro pero que el trabajador pruebe que fueron causadas por la realización de su trabajo, también pueden ser consideradas.
3. Accidentes “in misión”: Incluyen aquellos incidentes que ocurren cuando el trabajador está realizando tareas encomendadas por el empleador fuera del lugar habitual de trabajo, incluyendo viajes de negocios.
4. Actos de salvamento: Si un trabajador sufre un accidente mientras realiza actos de salvamento o en situaciones similares que impliquen un acto de ayuda a otras personas, estos pueden ser considerados como accidentes de trabajo si existe una conexión con las actividades laborales.
Por ello, en el contexto de un accidente laboral, es fundamental entender la complejidad y el alcance de las prestaciones que pueden acompañar una indemnización. Cuando un trabajador sufre una lesión, en particular si esta implica un accidente de tráfico, las consecuencias pueden extenderse más allá de la pérdida física inmediata. Por ejemplo, una lesión en la articulación interfalángica no solo afecta la movilidad del dedo, sino que puede comprometer la capacidad del trabajador para desempeñar su labor, afectando su vida profesional y personal de manera significativa.
¿Cuáles son los casos de indemnización por accidente de trabajo?
Como hemos dicho anteriormente, cuando un trabajador sufre un accidente laboral, tiene derecho a percibir una indemnización como contraprestación por los daños sufridos, en el caso de que la empresa incumpla la normativa de Prevención de Riesgos Laborales.
Estos son algunos ejemplos de situaciones que pueden dar lugar a una indemnización: accidentes debido a la falta de medidas de seguridad adecuadas, uso de maquinaria defectuosa, exposición a sustancias tóxicas sin protección adecuada, entre otros. En cada uno de estos casos, es importante determinar si existió negligencia por parte del empleador y evaluar su responsabilidad legal en el evento lesivo. Además, cualquier condición de trabajo que aumente el riesgo de sufrir un accidente debe ser analizada para establecer si facilita el acceso a dicha indemnización.
A continuación, os mostramos una lista con los casos de indemnización por accidente laboral y de baja laboral a causa de un accidente laboral:
1. Incapacidad Permanente Parcial
Limitaciones: Aquellas que superan el 33%.
Indemnización: Derecho a recibir una indemnización de 24 mensualidades.
2. Incapacidad Permanente Total
Incapacidad: No puede realizar la profesión habitual, pero puede realizar otras profesiones.
Pensión: Recibe una pensión del 55% de la base reguladora.
3. Incapacidad Permanente Absoluta
Incapacidad: No puede realizar la mayoría de las profesiones.
Pensión: Recibe una pensión del 100% de la base reguladora.
4. Incapacidad Permanente Gran Invalidez
Incapacidad: No puede realizar la mayoría de las profesiones y necesita ayuda para realizar las actividades diarias.
Pensión: Recibe una pensión del 100% de la base reguladora, con un aumento según las necesidades específicas.
Estos tipos de incapacidad reflejan las diversas maneras en que un accidente laboral puede impactar significativamente la capacidad laboral de un trabajador. La legislación española sobre seguridad social y laboral está cuidadosamente diseñada para proporcionar compensaciones que sean adecuadas y justas, adaptadas a cada nivel de incapacidad. Esta estructura de compensación no solo ayuda a mitigar los efectos económicos de la incapacidad sobre el trabajador y su familia, sino que también refleja un compromiso social para con la protección de los trabajadores en su entorno laboral.
Al definir claramente diferentes niveles de incapacidad y las correspondientes compensaciones, la ley asegura que los trabajadores que sufren accidentes en el trabajo reciban el apoyo necesario para enfrentar desafíos físicos, emocionales y económicos. Estas medidas son esenciales para facilitar la rehabilitación y, cuando sea posible, la reincorporación al mercado laboral, o en casos más severos, garantizar un sustento digno a aquellos que no puedan volver a trabajar.
¿Quien paga indemnización por accidente laboral?
La responsabilidad por el pago de indemnizaciones debido a accidentes laborales puede recaer en varias entidades, dependiendo de la naturaleza del accidente y de las políticas de seguro que la empresa tenga en vigor.
Entre ellas, encontramos las siguientes:
1. Mutuas de accidentes de trabajo: Estas entidades, que colaboran estrechamente con la Seguridad Social, suelen ser las principales responsables del pago de las indemnizaciones por accidentes laborales. Las mutuas cubren los costos médicos necesarios y proporcionan subsidios por incapacidad temporal. Además, en casos de incapacidad permanente, gestionan y aseguran el pago de las pensiones correspondientes a estas situaciones.
2. Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS): Este organismo público se encarga de la gestión y el pago de las pensiones por incapacidad permanente, ya sea total, absoluta o gran invalidez, basándose en evaluaciones médicas que determinan el grado de incapacidad del trabajador accidentado.
3. Aseguradoras privadas: Si la empresa tiene contratado un seguro de accidentes de trabajo que cubra más allá de lo que ofrece la Seguridad Social o las mutuas, estas aseguradoras pueden ser responsables de pagar indemnizaciones complementarias. Estas pólizas pueden cubrir aspectos que no están incluidos en las prestaciones estándar, como compensaciones por daños morales o mayores coberturas económicas.
4. El empleador: En casos donde se evidencia que el accidente fue causado por negligencia del empleador respecto a las normas de seguridad y salud en el trabajo, este puede ser directamente responsable de pagar recargos sobre las prestaciones. Estos recargos son penalizaciones que se suman a las prestaciones habituales y buscan ser un disuasivo para que las empresas cumplan rigurosamente con la legislación de prevención de riesgos laborales.
Es importante destacar que cada caso de accidente laboral es único y la determinación de quién paga la indemnización puede depender de múltiples factores, incluyendo las circunstancias específicas del accidente, la cobertura de seguro de la empresa, y la legislación vigente en materia de seguridad y salud en el trabajo.
¿Cuál es la tabla de indemnizaciones por accidente laboral 2025?
Las indemnizaciones por días de curación sufrirán un ajuste con el nuevo baremo. A continuación, te dejamos con las cifras actualizadas para el año 2025:
Día muy grave = 127,01€
Día grave = 95,26€
Día moderado = 66,04€
Día básico = 38,10€
Tenemos que tener en cuenta, que el baremo que la jurisprudencia ha recogido para cuantificar las indemnizaciones es el de la Ley 35/2015 relativa a accidentes de tráfico, pero no tiene nada que ver con el tipo de accidente. Este baremo permite calcular de manera más justa las indemnizaciones, reflejando fielmente el impacto real de las lesiones laborales en la vida del trabajador.
Adicionalmente, se considera el periodo de reposo, rehabilitación y cualquier tratamiento necesario que contribuya a la recuperación del trabajador. Es importante que el trabajador reciba una valoración médica adecuada para determinar el alcance de sus lesiones y la correspondiente incapacidad que sobrevenga de un accidente. Las indemnizaciones también pueden considerar otros aspectos, como el impacto psicológico del accidente y las posibles secuelas que puedan surgir, teniendo en cuenta siempre el bienestar y los derechos del trabajador afectado.
¿Cómo calcular la indemnización por accidente laboral?
Calcular la indemnización por accidente laboral implica una serie de factores y criterios específicos que deben considerarse para determinar la cantidad adecuada que debe recibir el trabajador afectado. Aquí te explico cómo se realiza este cálculo:
1. Determinación de la Invalidez: Primero se debe establecer el grado de invalidez que ha resultado del accidente. Esto se hace a través de una evaluación médica que puede clasificar la invalidez como temporal o permanente, y dentro de las permanentes, variar entre parcial, total, absoluta o gran invalidez.
2. Base Reguladora: Se calcula tomando en cuenta el salario del trabajador. Generalmente, se considera el promedio de las cotizaciones del trabajador durante un período determinado antes del accidente. Esta base será crucial para determinar el monto de la compensación.
3. Tipo de indemnización: Dependiendo del tipo de invalidez, la indemnización puede variar.
Incapacidad Temporal: Durante este periodo, el trabajador recibe un subsidio que suele ser un porcentaje del salario regulador, pagado por la Seguridad Social o la mutua colaboradora.
Incapacidad Permanente Parcial: Generalmente se concede una indemnización en forma de pago único que compensa la pérdida de capacidad laboral.
Incapacidad Permanente Total: Este tipo proporciona una pensión que puede ser hasta el 55% o más de la base reguladora, dependiendo de la edad y otras circunstancias.
Incapacidad Permanente Absoluta y Gran Invalidez: Estas incapacidades suelen resultar en una pensión que equivale al 100% de la base reguladora, con adicionales en caso de necesitar asistencia de terceras personas.
4. Cálculo del importe: La cantidad exacta de la indemnización o pensión se calcula en base a estas definiciones y la legislación vigente que regula estas compensaciones. Incluye fórmulas específicas que multiplican la base reguladora por un porcentaje según el grado de incapacidad y otros factores relevantes como la edad y la profesión.
5. Factores adicionales: En algunos casos, pueden considerarse factores adicionales como compensaciones por daños morales, dolor físico, o deterioro de calidad de vida. Además, si se demuestra que hubo negligencia por parte del empleador, pueden aplicarse recargos sobre las prestaciones.
Es esencial reconocer que las indemnizaciones por accidentes laborales deben abarcar no solo los daños físicos sino también las pérdidas económicas derivadas, tales como la disminución o pérdida de ingresos debido a la incapacidad temporal o permanente para trabajar. En circunstancias de incapacidad permanente, es prioritario que el trabajador reciba una compensación que refleje adecuadamente la pérdida de su capacidad de ganancia a largo plazo. Esta compensación debe considerar tanto la severidad de la incapacidad como el impacto en las futuras oportunidades laborales del individuo.
Por otro lado, las indemnizaciones por incapacidad temporal están diseñadas para sostener al trabajador durante su periodo de recuperación y rehabilitación, asegurando que pueda volver a su estado laboral óptimo. En contraste, las compensaciones por incapacidades permanentes están orientadas a garantizar un sustento económico continuo, dado que el trabajador podría enfrentar limitaciones que le impidan retornar a cualquier forma de empleo habitual.
Adicionalmente, en situaciones donde las lesiones resulten en una alteración significativa de la calidad de vida del trabajador, pueden justificarse indemnizaciones más elevadas. Esto incluye compensación por dolor y sufrimiento, alteraciones en la vida personal y familiar, y otros aspectos psicológicos o emocionales que puedan afectar de manera prolongada al individuo. Las evaluaciones detalladas y el asesoramiento de expertos en medicina y derecho laboral son cruciales para determinar el alcance total de la compensación adecuada, asegurando que todas las necesidades del trabajador lesionado sean plenamente reconocidas y atendidas en el marco legal pertinente.